Convertir a Bellingham en Pichichi o sacar de la concha a Arda Güler servirán de estímulo a los blancos en el torneo mientras libran la gran guerra por conquistar la Champions Navegación de entradas Un asistente malagueño, seleccionado para arbitrar en la Eurocopa La posible continuidad de Xavi en el banquillo del Barça cobra fuerza