El fichaje de Jude Bellingham por el Real Madrid entra en su recta final. El club de Chamartín ha tomado la delantera al Manchester City en la pelea por reclutar al centrocampista inglés y en los próximos días intensificará las negociaciones con el Borussia Dortmund para tratar de rebajar los 140 millones de euros que pretende sacar la entidad de la cuenca del Ruhr por su gran estrella. Después de pasar muchos meses cortejando a Bellingham, el Real Madrid está cerca de dar un nuevo golpe encima de la mesa dentro de su apuesta por atesorar a los jugadores que están llamados a gobernar el fútbol mundial en los próximos años. Según informan Bild y Marca, el británico prefiere continuar su carrera en el Santiago Bernabéu y su aterrizaje en la capital española a partir del 30 de junio podría quedar cerrada en las próximas semanas. Firmaría por seis años y sería uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla. El principal escollo en las negociaciones radica en las pretensiones económicas del Borussia Dortmund, que esperaba sacar unos 140 millones de euros por Bellingham. El Real Madrid, sin embargo, no quiere llegar a esas cifras y confía en rebajar la cantidad a unos 120 millones de euros como máximo. La buena relación que mantienen ambas entidades podría facilitar el acuerdo y propiciar el que sería uno de los fichajes estrella del verano. Consciente de que no podía competir con el Manchester City o el Liverpool en el apartado económico, el Real Madrid trazó hace meses una minuciosa estrategia para atraer a Bellingham ofreciéndole la posibilidad de jugar en el equipo más laureado del planeta y convertirse en una de las vigas maestras dentro del proceso de rejuvenecimiento de una plantilla sostenida todavía por los Benzema, Modric o Kroos, pero en la que Vinicius, Valverde, Camavinga o Rodrygo van adquiriendo cada vez más galones. La familia de Bellingham se inclinaba por el retorno del crack a Inglaterra, país que abandonó con 17 años para curtirse en la Bundesliga, tras despuntar con el Birmingham en plena adolescencia. Pero finalmente parece haber pesado más en la decisión de Bellingham el proyecto deportivo que le planteaba el Real Madrid que los cantos de sirena que llegaban procedentes de las Islas Británicas. El objetivo del Real Madrid es completar el fichaje de Bellingham en las próximas semanas y anunciarlo una vez que termine la campaña en la Bundesliga, puesto que el Borussia Dortmund mantiene una cerrada pelea por el título en estos momentos con el Bayern de Múnich y los aurinegros no quieren que la marcha del equipo se vea afectada por elementos externos. Renovación de un centro del campo legendario En caso de recalar finalmente en el Real Madrid, el inglés podría convertirse en el fichaje más caro en la historia del club de Chamartín, superando las cifras que los blancos pagaron en su día por Cristiano Ronaldo (94 millones de euros) o Gareth Bale (101 millones de euros). La palma, por el momento, se la lleva Eden Hazard, reclutado del Chelsea en el verano de 2019 por una cantidad que rondó los 115 millones de euros. Con la llegada de Bellingham, un talento que el 29 de junio cumplirá los 20 años, el Real Madrid terminaría de cubrirse las espaldas dentro del proceso de renovación del legendario centro del campo que integraron Casemiro, Modric y Kroos, determinante en las cinco últimas Champions ganadas por el conjunto de Chamartín. Una regeneración que comenzó con la llegada en 2021 de Eduardo Camavinga (20 años) a cambio de 30 millones de euros para el Rennes y que continuó el pasado verano con el aterrizaje de Aurélien Tchouaméni (23 años), por el que el Real Madrid abonó 80 millones de euros más 20 en variables al Mónaco. A los dos internacionales franceses hay que sumar la presencia de Federico Valverde, quien a sus 24 años se ha convertido en uno de los líderes del equipo que dirige Carlo Ancelotti, casi siete años después de recalar en Chamartín previo pago de 5 millones de euros al Peñarol, su club de formación. Bellingham llegó al Borussia Dortmund en el verano de 2019. La entidad renana realizo una fuerte apuesta al pagar 25 millones de euros por un centrocampista ofensivo que ni siquiera había debutado en la Premier League y que apenas contabilizaba una temporada en la Championship con el Birmingham. Desde entonces, el británico ha disputado 130 partidos con el equipo del Signal Iduna Park, en los que ha marcado 25 goles y ha repartido 27 asistencias. Además, ha sido 24 veces internacional con Inglaterra, brillando en el Mundial de Catar.