Nueva York le alumbró como el gran magnate de los hoteles y hoy vuelve a la Gran Manzana para ser juzgado; así ha sido el pasado del hombre que se hacía pasar por su agente para contar lo rico que era Navegación de entradas Tácticas terroristas para acabar con los aliados del Kremlin Benita Mendiola, niña de la guerra: «Siento simpatía por Rusia. Éramos muy felices»