En su escrito al juzgado, el alto mando de la Guardia Civil afirma ser una «víctima de la pérfida estafa urdida» por el mediador y asegura que su único delito ha sido «fanfarronear» en alguna ocasión Navegación de entradas El juego del techo de cristal: ¿dónde están las mujeres? Sánchez invade el fortín de Irene Montero